Apple, buy now pay later (BNPL), Euro digital y Revolut
Bienvenidos a Trading & Blockchain, un blog donde escribimos sobre las historias de cómo los mercados de capitales evolucionan y se transforman en esta era digital
Esta semana escribimos sobre la entrada de Apple al mercado de buy now pay later (BNPL), donde está Affirm, Klarna, Afterpay y Addi; sobre el anuncio del Banco Central Europeo respecto del euro digital y los avances del yuan digital; y sobre la reciente capitalización de Revolut. Veamos:
Apple, buy now pay later (BNPL), Affirm, Klarna, Afterpay y Addi
Hace más o menos un mes, Apple realizó su evento anual Worldwide Developer Conference (WWDC) que es un escenario para sus desarrolladores con todas las novedades que llegan a los famosos dispositivos de Apple. Con cerca de 25 millones de vistas en la edición 2020, vale la pena verlo, aún si no estás en el mundo de desarrollo de aplicaciones. En la conferencia, el mismo Tim Cook y su equipo, presentaron los desarrollos sobre video (FaceTime tendrá aislamiento de voz), audio (Siri se dirige a dispositivos de terceros), procesamiento en el dispositivo (más tareas de machine learning), búsqueda (Live Text AI reconocerá e indexará texto en sus fotos), privacidad (Private Relay, un servicio similar a una VPN), identidad (Apple Wallet para desbloquear autos, casas y habitaciones de hotel compatibles). Es una visión a la forma como una compañía se conecta con sus usuarios para ofrecer una experiencia más agradable.
Al tratarse de una conferencia para desarrolladores de aplicaciones que luego son vendidas a través del App Store de Apple, hay un tema que siempre ha generado controversia: las comisiones de Apple a los pagos integrados en la aplicación (in-app payments). Con tarifas del 30%, son muchos los desarrolladores que expresan su queja por el funcionamiento de la plataforma, así como están sus defensores. iOS es el lugar #1 para desarrollar aplicaciones, y lidera en Norteamérica sobre Android, además que los propietarios de iPhone también gastan más dinero. Sin embargo, esta controversia ha llegado hasta los tribunales de competencia. Ya la Unión Europea ha dictaminado que las prácticas de Apple Music / App Store violan la ley de competencia, por lo que seguramente habrá cambios en el futuro próximo.
Lo que resulta interesante en este contexto es la aproximación que hace ahora Apple hacia el novedoso mercado de “comprar ahora y pagar después” (buy now, pay later, BNPL) que está en boga en el entorno de las fintechs de préstamos. Pues bien, la noticia es que Apple, respaldada por Goldman Sachs, planea agregar una función de BNPL a Apple Pay. Con esto, se amplia la competencia a las tarjetas de crédito. Inicialmente, la forma más fácil de retrasar el pago de una compra era a través de las tarjetas de crédito, pero recientemente fintechs como Affirm, Klarna, Afterpay o Addi, permiten que los compradores paguen cualquier cosa en cuotas sin intereses. Esto ha hecho que Klarna logre una valoración de $45,6 billones. Y eso mismo, ha atraído a jugadores como Apple.
Un servicio como BNPL permite a los clientes de un establecimiento diferir el pago de sus facturas, sin pagar altos intereses como en las tarjetas de crédito, mientras que las tiendas cubren el costo del crédito para atraer a los compradores a gastar más en línea o en sus tiendas. Los consumos diferidos a un mes con las tarjetas de crédito, generalmente no pagan intereses, pero el resto, tienen tasas de interés que son muy altas. Por eso la competencia en ese sector es vital para consumidores y tiendas.
Y es que, tras 60 años de funcionamiento de las tarjetas de crédito, la innovación ha sido escasa. Desde 1958 cuando fueron introducidas por Bank of America, las tarjetas funcionan de forma muy similar, a pesar de que han agregado puntos de fidelidad, seguros y recompensas, pero el crédito mensual continuo sigue siendo la esencia. La propuesta ha resultado tan atractiva que Klarna, fundada en Suecia en 2005, acabó de levantar una ronda de us$640 millones a una valoración de us$45,6 billones, con más de us$1 billón en ingresos operativos netos, y más de 90 millones de clientes activos y 250.000 tiendas. Un aspecto que resulta interesante es que Klarna opera también como un procesador de pagos, con lo cual gana dinero (30% de sus ingresos), con las compras en las que no gana por los intereses, pero en las que compite como una opción de pago con las empresas de pagos.
Ahora, como con la historia de las tarjetas de crédito, el problema siempre está en la acumulación de compras impulsivas. Los usuarios de BNPL tienen entre 18 y 36 años, y el 90% de las transacciones han sido de moda y calzado. Ya en algunas jurisdicciones como en Suecia, se ha empezado a regular, por ejemplo, con restricciones para que el pago diferido no sea la opción predeterminada, y en mayor transparencia sobre los costos totales para los consumidores. La tasa, si debe ser un tema de competencia. En medio de la regulación que enfrenta Apple por su App Store, es posible que la misma se incremente cuando las plataformas entren a terrenos como el de BNPL, sobre todo cuando 500 millones de usuarios de iPhone han habilitado Apple Pay.
De otro lado, es también una demostración de la forma como las big tech están entrando al terreno de las fintech. Apple y Google se han estado asociando con bancos para integrar la banca en sus servicios, mientras que Amazon está buscando prestamistas institucionales para expandir sus ofertas de préstamos. También significa una amenaza para las entidades financieras tradicionales, pues los servicios financieros están cada vez más entrelazados con aplicaciones no bancarias, lo que ofrece a las big techs más incentivos y apalancamiento para mantener sus ofertas financieras internamente y ofrecer servicios bancarios mejorados a sus grandes bases de usuarios.
Euro digital para 2023
Esta semana el Banco Central Europeo (ECB) anunció el lanzamiento de un proyecto de euro digital, una moneda digital emitida por el mismo ECB (central bank digital currency), en su fase de investigación que tomará 24 meses. Sin embargo, la misma presidente del BCE, Christine Lagarde, ha declarado que, si decidieran continuar, su lanzamiento tardaría cinco años. Dos decisiones que acompañan la noticia es que el diseño se basará en las preferencias de los usuarios y en el asesoramiento técnico proporcionado por comercios e intermediarios.
El ECB señaló que la fase de investigación tendrá una duración de 24 meses y tendrá como objetivo abordar cuestiones clave relacionadas con el diseño y la distribución. Un euro digital debe poder satisfacer las necesidades de los europeos y, al mismo tiempo, ayudar a prevenir las actividades ilícitas y evitar cualquier impacto indeseable en la estabilidad financiera y la política monetaria. En cualquier caso, las autoridades han señalado que un euro digital complementaría el efectivo, no lo reemplazaría. Durante la fase de investigación del proyecto, el ECB se centrará en un posible diseño funcional que se base en las necesidades de los usuarios. Involucrará grupos focales, prototipos y trabajo conceptual. La fase de investigación examinará los casos de uso que un euro digital debería proporcionar como cuestión prioritaria para cumplir sus objetivos: una forma de dinero del banco central digital sin riesgos, accesible y eficiente. El proyecto también arrojará luz sobre los cambios en el marco legislativo de la Unión Europea que podrían ser necesarios y que serán discutidos y decididos por los colegisladores europeos. Finalmente, la fase de investigación evaluará el posible impacto de un euro digital en el mercado, identificando las opciones de diseño para garantizar la privacidad y evitar riesgos para los ciudadanos de la zona del euro, los intermediarios y la economía en general. También definirá un modelo de negocio para intermediarios supervisados dentro del ecosistema del euro digital.
En un post anterior (aquí) escribimos sobre las CBDC. Sin éstas, el riesgo que enfrentan las economías es que sus monedas no digitales sean reemplazadas por monedas estables privadas (stablecoins) que facilitan el comercio internacional. Esto solo dificultaría la política monetaria, y pondría en riesgo la estabilidad financiera. De otro lado, un cronograma de ejecución tan largo, puede llevar a que se materialice ese riesgo. Las infraestructuras de pago hoy en día son fundamentalmente de empresas globales, como Visa, Mastercard y las Big Tech, pero ninguna de ellas es una empresa europea, por lo que la UE está interesada en promover infraestructuras de pago propias, con proyectos como la European Payments Initiative.
El paso de la discusión a la exploración de una CBDC es algo que muchos otros bancos centrales, han hecho en el último año. Ya el mismo Reino Unido expresó su interés en mantener una preponderancia en el comercio europeo, y probablemente podría hacerlo desarrollando de manera anticipada una CBDC sobre su libra esterlina. Entre las principales economías, China lidera los planes de CBDC, mientras que Corea del Sur y Suecia han pasado de la exploración a las pruebas en los últimos meses. De hecho, esta semana el People’s Bank of China (PBOC) también publicó el whitepaper para el e-CNY o yuan digital, en el que establece explícitamente que la CBDC será emitida directamente por el banco central y los bancos comerciales simplemente la distribuirán. Un tema que tendrá enormes consecuencias en el modelo de negocio de los bancos.
Revolut valorada en us$33 billones
Revolut, la superapp financiera con más de 16 millones de clientes en todo el mundo, anunció una ronda de financiación Serie E de us$800 millones a una valoración de us$33 billones, en la que participaron dos nuevos inversores, SoftBank Vision Fund 2 y Tiger Global Management. Revolut señaló que utilizará la inversión para avanzar en sus planes de crecimiento, en particular su innovación de productos dirigida a satisfacer las necesidades y aspiraciones financieras diarias de los clientes, desde transferencias globales rápidas y fáciles, hasta administrar todo, desde ahorros hasta seguros, hasta democratizar la gestión patrimonial y el comercio. También apoyará la expansión de la oferta de Revolut a los clientes de los Estados Unidos, su entrada a India y otros mercados internacionales. Interesante.
Revolut, con sede en Londres, fue fundada en 2014 por Nikolái Nikoláievich Storonski, inmigrante ruso en el Reino Unido. Antes de fundar Revolut, trabajó en Credit Suisse y Lehman Brothers. En una entrevista en Forbes dijo que fundó Revolut porque “viajaba mucho y malgastaba cientos de libras esterlinas en transacciones en moneda extranjera y comisiones de cambio de moneda. Al tener una formación académica en economía sabía exactamente cuánto tendría que pagar en comisiones. Intenté buscar una tarjeta multidivisa pero me dijeron que no era posible. Desde entonces me dedico a que sea posible”. En 2018, Revolut obtuvo una licencia bancaria del Banco Central Europeo, convirtiéndose en un challenger bank con posibilidad de aceptar depósitos y ofrecer créditos de consumo- Así mismo, desde 2019 ofrece servicios de inversión sobre compañías listadas en Nasdaq y NYSE con cero comisión. Actualmente ofrecen cripto, negociación de acciones, cuentas para PyMEs, pagos, tipos de cambio líderes en el mercado y presencia en más de 30 mercados. Un enfoque en crecimiento acelerado. Por eso no están preocupados por la rentabilidad. Buscan ser la fintech global con todos los servicios empaquetados, para lo cual requieren ese alcance global. Ya veremos cómo lo logra.